martes, 15 de diciembre de 2015

No te puedes esconder.

Y vuelves a sonreír
cada vez que la ves,
no eres capaz de disimular
esa comisura que trazan tus labios
cada vez que pasa cerca de ti.

Deja de esconderte
cualquier se da cuenta,
pero tú no quieres;
demasiado ignorante para ella
que daría mucho,
como la musa de poetas
que los dejaría a todos
por ser escrita
a través de tus manos.

Mira tu imagen
reflejada en sus pequeños ojos,
cuéntame ese brillo que ves
y eso que te hace sentir.
No, ya lo sé,
claro que no te puedes esconder.

No hay comentarios:

Publicar un comentario